¿Por que no es lo mismo?

Recuerdo el sufrimiento cuando partió Malú. Fue duro. Ella sufrió mucho a causa de la quimioterapia y se fue en 2 semanas apenas. Mishka no. Al menos no de la forma que lo pasó Malú. Creo que el haber tomado la decisión de hacerla dormir ayudó a mitigar en algo el dolor. Sin embargo, ¿por que la diferencia?.

Supongo que con las que vengan a mi vida será lo mismo. Mi mami me dijo que “no a todos los hijos se les quiere por igual”. Yo no soy padre, no tengo hijos. Mis perras fueron y serán siempre mis hijas. No es lo mismo, lo se, pero creo que es lo que más se aproxima.

Photo_00003Ayer, mientras caminaba por la madrugada, como en más o menos 1 hora volveré a hacer, recordé que cuando me trajeron el viernes por la tarde las cenizas de mi niña, pasó por mi mente el aplaudir justo cuando la puse en el lugar en que esta ahora, al costado de su hermana, pues eso mismo hice cuando trajeron a Malú. Sin embargo no lo hice. Y ahora cargo el enorme sentimiento de culpa por haber sido “discriminador” con mi hija.

Extraño a Malú, no lo niego, y Dios quiera que pueda algún día tener otra pastor alemán, pero yo en verdad quisiera que volviera Mishka. Sufrida como ella pocas. Fiel como ella muy pocas en verdad. Nos despedimos a nuestro modo. El viernes por la mañana la traje a mi cuarto, la puse sobre mi pecho y en un momento dado me empezó a lengüetear y besar. Así nos despedimos.

Hoy me quedé dormido, hace 10 minutos desperté y la vela estaba apagada. Que pronto le fallé a Mishka. La vida es tan vacía y tan gris ahora. Si cuando partió mi amada pastor alemán sufrí y perdí mucho, ahora que ha partido Mishka, tan chiquita ella, la casa quedó vacía.

Como te extraño amor. Te extraño mucho. Perdóname.

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